El Granada - Barcelona en 5 claves

Llegó la primera derrota del Granada en el retorno de Lucas Alcaraz al banquillo rojiblanco. Pero se perdió contra el líder de La Liga y dejando buenas sensaciones, así las derrotas son menos amargas. Aunque pica ver lo cerca que se estuvo de al menos puntuar. Ya han pasado por Los Cármenes los focos mediáticos de Madrid y Barcelona, con un balance positivo para los intereses granadinos y dando buena imagen.  Ahora toca centrarse en lo verdaderamente importante, la salvación.

Pasamos a analizar las claves del último partido.

1 Efecto veleta:

El partido transcurrió para ambos equipos según soplaba el viento en cada instante. En los primeros minutos el Barcelona tocaba con parsimonia el y Granada lo esperaba atrás ejerciendo una intensa presión para robar y contragolpear con velocidad. Así llegó la primera ocasión de Nolito y el posterior gol de Ighalo. Entonces los azulgrana aceleraron la maquinaria y el Granada se vino atrás para salvaguardar el resultado. En la segunda mitad los locales dejaron el dominio absoluto a los catalanes que remontaron de la mano de Messi. Entonces la situación se volteó y fue el Barcelona el que intento dormir el partido y el Granada el que se fue a por el empate, que acarició en un par de ocasiones igual que el Barcelona estuvo cerca de sentenciar un marcador que finalmente no se movió.

2 Errores individuales:

El Barcelona tuvo ocasiones claras, clarísimas. Pero no era su noche. Alexis no estaba fino y desperdiciaba un par de mano a mano contra Toño. Los disparos que otras veces iban dentro acababan en la grada. Y cuando no, el último pase dejaba en fuera de juego al rematador. Pero finalmente Messi dio la vuelta al electrónico en un nuevo record del argentino que encadena 14 jornadas marcando y llega a 300 goles de azulgrana. Pero esta vez aprovechándose de errores de los rojiblancos. El primer tanto en un balón que rechazó Toño al centro, franco para el delantero. El segundo en una falta directa que superó la barrera justo donde Nyom en vez de saltar como sus compañeros apartó la cara para dejar vendido al portero. Los grandes equipos marcan las diferencias porque se aprovechan del mínimo error del rival, y el Granada lo acabó pagando sin puntuar un partido en el que pudo llevarse algo de botín.

3 Cambios:
Lo que sí quedó claro es que el Granada tiene un amplio fondo de armario que ofrecen otras variantes de juego. Salieron El Arabi, Brahimi y Buonanotte. Y aunque el primero estuvo algo espeso, los dos mediapuntas se asociaron con facilidad y pusieron en aprietos al Barcelona. No se escondieron e hicieron que los culés tuvieran que perder tiempo en los últimos minutos. Algunos ya alzan la voz de su necesaria titularidad, pero hay que sopesar que el equipo funciona como hasta ahora, con jugadores bondadosos en las ayudas a sus compañeros. Brahimi y Buonanotte son alternativas de garantías para partidos atascados o complicados en el marcador donde es necesario más mordiente en ataque. Pero no hay duda que si muestran compromiso defensivo podrían hacerse con un hueco en el once. Mientras tanto son un recambio de garantías que aportan facilidades para los últimos minutos.

4 Llegar a los últimos cinco minutos con el partido vivo:

Lo mejor que pudo pasar al Granada es que el Barcelona desperdiciara sus oportunidades y llegara a los minutos finales cerca en el marcador. Eso permitió tener fe en al menos puntuar y apretar un poco a los azulgranas. Y el empate estuvo en un par de acciones, la primera en un remate de cabeza picado de Iñigo que fue a las manos de Valdés y ya en la prolongación Brahimi se quedó solo ante Víctor para que el portero sacara el balón con su brazo cuando se dirigía a la portería para enviarlo a corner, que por cierto el colegiado no señaló. Así al menos los últimos minutos fueron apasionantes y nadie quiso levantarse de sus asientos.

5 Moral:

La afición rojiblanca quedó satisfecha con el partido, y aunque hubieran deseado sumar algún punto, el esfuerzo y el sacrificio de los suyos ante el denominado "mejor equipo del mundo" les dejó saciados. Tuvieron sus opciones y finalmente se agradeció en una gran ovación tras el pitido final a los jugadores reunidos en el centro del campo y que habían dado la cara durante 90 minutos. Estos 3 partidos que lleva Alcaraz dirigiendo al equipo han dejado muy buenas sensaciones, sobre todo de cara a los 3 siguientes compromisos contra rivales directos por la permanencia: Celta, Mallorca y Zaragoza. Ahí es donde de verdad el Granada debe dejar claro que tiene calidad suficiente como para resistir una temporada más en primera. Y la moral con la que encara esta fase de campeonato está por las nubes, solo falta que no se les suba a la cabeza y luchen por sentenciar su salvación con buenos resultados contra sus contrincantes lo antes posible.


Los rivales por debajo en la tabla han pinchado esta jornada, por lo que el Granada sigue exactamente igual que antes del partido, en decimocuarta posición y con un colchón de 6 puntos sobre el descenso. Pero hay que andarse con cuidado que un par de deslices con el añadido que los enfrentamientos son contra rivales directos puede volver a complicar la situación de los rojiblancos. Por el contrario, encadenar una buena racha justo ahora haría que dieran un golpe de autoridad contra rivales directos y casi dejar lista la permanencia.

Cipri, redactor del Granada CF para 6cero.com. Sígueme en twitter:  @funkcje