En la mañana de hoy jueves se le ha practicado una resonancia magnética para comprobar el alcance de la lesión y según ha anunciado el club el jugador rojiblanco presenta una microrotura fibrilar del bíceps femoral de la pierna izquierda, siendo el periodo de baja estimado entre dos y tres semanas. De esta forma se perdería los partidos de esta jornada contra el Valladolid, el de Copa contra el Zaragoza y el siguiente de liga contra el Espanyol. Su retorno estaría previsto (dependiendo de su evolución) para el partido de la Rosaleda contra el Málaga o el siguiente contra la Real Sociedad, que se disputarán a mediados de Diciembre.
Esta lesión se ha producido en el momento menos oportuno de la temporada. Y es que actualmente Brahimi se estaba convirtiendo en indiscutible en el mediocampo granadinista, desempeñando a la perfección el papel de enganche entre los centrocampistas y la delantera. Además cada partido se le veía con más confianza y mayor conjunción con sus compañeros, además de que poco a poco estaba cogiendo nivel tanto físico como táctico que conjugado con su gran calidad le estaban llevando a tener cada vez más protagonismo en el juego.
Además, justo ahora se le presentan al Granada una serie de encuentros fundamentales para la permanencia, ya que son ante teóricos rivales directos y ante los que necesita puntuar para salir de las posiciones conflictivas en la tabla. Y para colmo sin un sustituto de garantías para el enganche, ya que su teórico relevo sería Fabián Orellana, pero hasta ahora no ha demostrado ni el nivel ni la regularidad que si que estaba mostrando Brahimi. En principio el Chileno ocupará su sitio, pero si no mejora sus prestaciones es posible que Anquela pruebe con otro jugador de la plantilla o incluso varíe su esquema táctico para que el equipo note lo menos posible esta baja.
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